Hoy tuvo lugar el final por el juicio a Fernando Baez Sosa, quien fue asesinado a golpes mientras estaba de vacaciones en Villa Gesell, balneario de la provincia de Buenos Aires, en enero del año 2020.
Los acusados por ese crimen fueron 8 rugbiers que lo atacaron a la salida de un boliche bailable llamado LeBrique, aunque en el momento del hecho, participaron 11 personas.
Luego de 3 años y 15 audiciencias durante todo el mes de enero, hoy se conoció el veredicto y sentencia por ese crimen: Máximo Thompsen, Luciano y Ciro Pertosi, Matias Benicelli y Enzo Comelli fueron condenados a la pena de prisión perpetua por todos los cargos que pidió tanto la fiscalía y la defensa del particular damnificado, el estudio del Dr Fernando Burlando (quienes representaron a los padres de Fernando Baes Sosa, Graciela y Silvino) y a Lucas Pertosi, Ayrton Vilollaz y Blas Comelli a la pena de 15 años de prisión por ser considerados autores secundarios del asesinato.
También se dicto iniciar proceso legar por falso testimonio a Juan Pedro Guarino (participe del hecho pero absuelto por falta de pruebas) y a Tomás Colazzo (el rugbier numero 11 quien en el momento del hecho, era menor de edad).
Éste sin dudas fue un hecho que conmovio a toda la sociedad argentina y seguramente fue el juicio y pena más esperados de todos. El país pedía una pena ejemplar para que estos hechos tan aberrantes no vuelvan a ocurrir.
Durante la lectura del fallo, Máximo Thompsen se descompensó y debió ser asistido por un médico en la sala de audiciencias.
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